El viaje difícil - capítulo 1
- Admin
- Jan 7, 2018
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Preview of the novel, El viaje difícil
Son las diez de la noche. Por fin llego a la casa donde está mi familia. Tengo tres hijos, dos hijas y un hijo, y una esposa. Los niños están en la cama y Esmilda, mi esposa, está en la cocina. Ella prepara los frijoles para mañana.
Cuando entro por la puerta, saludo a mi esposa.
–Hola amor. ¿Cómo estás? –Hola José. Un día largo para ti. ¿Quieres comer? –Sí. Muchas gracias.
Normalmente trabajo 14 horas al día, desde las ocho de la mañana hasta las diez de la noche. Tengo dos trabajos. Durante el día trabajo en una pequeña fábrica de cuero muy cerca de la casa. Y por la noche soy taxista privado. Yo uso el carro de mi hermano para llevar turistas y otras personas a lugares diferentes.
Mi familia necesita el dinero de los dos trabajos. Los tres niños están en la escuela y necesitan materiales para estudiar. La verdad es que mi salario de la fábrica no es bastante y por eso soy chofer por la noche.
Tomo el caldo, una sopa, que Esmilda prepara y ella me presenta con otro problema económico.
–José, la lavadora no funciona. –¿Qué pasó? –le pregunto. –No sé. Pero ya no lava la ropa. –Está bien. –Tú sabes que la lavadora es necesario para mi trabajo. –Sí, Esmilda. Lo sé.
Este problema con la lavadora no es nada nuevo. Y yo sé muy bien que mi esposa necesita usarla para su trabajo. Además de cuidar a nuestra casa, ella trabaja para otra familia estadounidense que tiene una casa en el pueblo. Ella limpia su casa y a veces prepara la comida. También ella lava la ropa para otras familias que no tienen lavadoras. Como yo, mi esposa tiene dos trabajos. Con cuatro trabajos a veces el dinero no es suficiente. No somos personas ricas. Somos humildes. Pero la vida es muy difícil ahora, especialmente con este problema nuevo con la lavadora.
Los problemas económicos no solo son de nuestra familia. Hay muchas personas en Guatemala que sufren como nosotros. El país no es muy rico.
Le digo a Esmilda, –Mañana es domingo. Después de asistir a la iglesia con la familia, voy a tratar de arreglar la máquina.
–Gracias, José.

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